“¡Vaya Par!”, el nuevo proyecto de film de Robert Bellsolà

Otra de las gratas sorpresas que nos dio la gente que aportó a nuestro proyecto como mecenas, fue la de Robert Bellsolà. Un cineasta gerundense que contactó conmigo hace tiempo, solicitando ayuda y apoyo para sacar a la luz su primer baratometraje, “Passi el que Passi” (“Pase lo que pase”). Me acuerdo perfectamente de la larga conversación telefónica que mantuvimos, donde tengo por seguro que Robert tomó buena nota en una libreta, porque no muchos meses después se enfrentó al gran reto indie del que me hablaba. Estrenar su peli en salas de cine, sin distribuidora de por medio y con la ayuda de las redes sociales, buenos materiales, sólo copias en digital y tan sólo unos pocos euros.

 

Desde entonces, tras otras sesiones de asesoría a distancia y sin ver aun la película, aporté mi granito de arena, poniendo en mi muro de Facebook información de su página de fans, cuyo slogan y grito de guerra era “un film 100% sin subvenciones”. Su afronta a la industria seguía el camino de la que yo hice con “Shevernatze”, aunque el factor de hacer un estreno limitado a Catalunya, algo coherente dado el idioma de rodaje y su capacidad de maniobra allá, creo que le daba un poco de ventaja, así como ese gancho de decir literalmente al respetable que su dinero no había servido para pagar la película.

Y el día que ví “Passi el que Passi”, que me encantó, es el mismo día que conocí a Robert en persona. Fue en la proyección en el Cine Doré (Filmoteca Española) del film para académicos y público, de cara a los Premios Goya, en noviembre de 2011. Son pases que hace la Academia de Cine con todas las películas inscritas a los premios, prácticamente todas las estrenadas en el año. Y a veces sirven para descubrir estas joyitas, que luego tampoco llegan a la nominación (para eso necesitas un lobby de académicos que te apoyen de verdad y voten la tuya en vez de otra más conocidad), pero que tienen su momento de visibilidad y la oportunidad de decir “estamos aquí”, como así hizo Robert, cuando la presentó, con la sala bien animada.

El pase lo que pase de Robert, que más allá de un título es un concepto vital, encubría perfectamente su modesto presupuesto y conviertía el proceso creativo de la escritura del guion en la premisa para contar la historia. Robert no ha doblado la peli al castellano (lo haría si hiciese falta de cara a la compra por alguna televisión),  pero su humor y cercanía la logra sin problemas en el catalán de origen, ya que el ansia por tener sexo (en este caso con tu propia mujer) es uno de los temas más universales y divertidos que puede haber.

Construyendo su propio y sólido guión para conseguir el objetivo, tal y como le ocurre al propio personaje, Robert ha vencido el miedo de “las páginas en blanco” y pasó ese examen de auto-estrenar comercialmente con nota y con el apoyo de unos 7000 fans en facebook. Las cifras oficiales del Ministerio de Cultura (aprovechamos para dar el link y con ello la pista de donde buscar esos datos) dan un total de 27.764,10 € y 4626 espectadores para Aiguaviva Films, nombre de la productora de Robert. Fueron unas 15 las copias en circulación desde el 17 de junio de 2011, fecha del estreno oficial, lo cual nos da una buena media por copia también.

La peli ha conseguido otros hitos, tal y como es que, de manos de un agente de ventas canadiense que Robert consiguió yéndose en persona al Festival/Mercado de Cannes y Berlín se haya vendido internacionalmente a televisiones y en DVD (Turquia, Francia, Bélgica y Rusia). Pero también ha llegado a estrenarse en los cines de Polonia y ser comprada por TV3 para su emisión en esa cadena. Y, casi como una obligación para que todo esto tenga coherencia, Robert ha escrito otro film y se ha puesto a desarrollarlo, para dar el salto a una producción más grande.  Ese nuevo proyecto se llama “Caram Quim Parell!” (“¡Vaya par!”). Y ya ha encontrado coproductor, otra productora catalana, con un excelente y envidioso modelo de negocio a base de inversores privados, llamada Silencio Rodamos.

No sabemos qué presupuesto final tendrá “¡Vaya Par!” y si podremos considerarlo un baratometraje, pero es el proyecto que se acogió a nuestra fórmula de patrocinio a 100€. Cuando quieres apoyar un proceso de micromecenazgo y eres también cineasta, tiene más sentido hacerlo con el nombre de tu proyecto o de tu empresa, más que bajo el nombre personal. Eso es lo que hizo Robert. Además, no me avisó. Y me dio una alegría enorme ver que devolvía aquellas consultorías telefónicas y electrónicas en forma de apoyo baratometrajil, justo cuando más “me” hacía falta.

Y haremos por él mucho más que entregarle las recompensas, porque será un placer que sepáis cómo va su proyecto gracias a nuestro eco. Por ahora, recordamos que “Passi el que passi” está a la venta en DVD y es un estupendo regalo para cualquier amante del cine que defendemos desde B.2.0. Ponemos en batería todas las divertidas piezas que ha ido haciendo para ir promocionando su proyecto. Esperamos vuestros comentarios.

 

 



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